Sufrir en silencio.
Hoy me desperté y vi una diferencia en mi estómago, estaba no se raro, estaba menos pronunciado pero al verme al espejo fue tan diferente, aún seguía hay las cosas grasientas que se desbordan por el pantalón, y me dije a mi misma que el esfuerzo que había hecho no era suficiente y hoy me derrote.
Toda la tarde me cuide pero en la noche al pasear por un supermercado compre un refresco y me lo tome, no todo, pero si la mitad.
Todo lo tire a la basura y tendré que comenzar, espero que no haya hecho mucho daño a mi esfuerzo pero fue tan lamentable cuando di el primer trago que dios quise correr a mi casa y ponerme hacer ejercicio.
Es triste muy triste.